dilluns, 22 d’agost del 2011

ZOOT TRIATLÓN TARRAGONA

El pasado 14 de agosto se celebró el ZOOT TRIATLÓN DE TARRAGONA. Nuestra ciudad se vistió de gala para acoger por primera vez un triatlón de esta categoría. Se juntaban muchos factores para que la jornada fuese un día grande del deporte en Tarragona: un entorno y un circuito inmejorables, una puesta en escena espectacular y una participación de triatletas de lujo, auguraban un día inolvidable para el espectáculo del deporte en nuestra ciudad.


Al final, nos entristece decirlo, pero no fue así. A veces son los pequeños detalles los que hacen grande una competición. Una verdadera lástima, pero la Zoot Triatlón Tarragona, quedó en parte deslucida por algunos aspectos organizativos.


Los ‘Esportistes Tarragona’ fueron representados por Pablo. Único atleta del Club especializado en las tres disciplinas que componen la triatlón: natación, ciclismo y running.


Pablo, al no estar federado, compitió en la categoría de “licencia de día”. Un total de 176 triatletas populares que componían esta categoría (casi el 40% del total de participantes de la triatlón), iniciaron la prueba pasadas las 10 h, aproximadamente dos horas más tarde de que los triatletas federados en categoría masculina tomaran la salida y unos minutos después de las triatletas federadas en categoría femenina. Así pues, a todos los efectos, se podía considerar que los triatletas “populares” competirían entre ellos, separados de los federados. GO populares!!


En la primera modalidad, los 1.000 metros de natación que transcurrían por la zona del puerto, Pablo salió del agua en 9ª posición, marcando un buen tiempo de 16’:50’’. Había nadado muy bien!....Salió del agua disparado hacia la zona de transición para enfrentarse a la modalidad que más temía, los 20 Km de ciclismo. Acostumbrado a su bike de montaña, había tenido muy pocas semanas para adaptarse a su nueva bici de carretera. No obstante, nuestras previsiones se confirmaron, a Pablo le sobra “madera de campeón” y una vez superados los 20 Km del circuito urbano, llegó a la zona de transición completándolo en tan solo 36’:31’’ y en 4ª posición!...tenía el podio al alcance de la mano, un esfuerzo más en la prueba de running bastaría para escalar alguna posición durante los 5 Km de carrera a pie. Después de casi una hora de esfuerzo titánico, el cansancio parecía que no hacia mella en él y poco a poco fue alcanzando a los atletas que le precedían, enseguida se puso en 3ª posición y no fue hasta la última curva, justo antes de entrar en la alfombra azul que conducía a la línea de meta, cuando tuvo que sacar fuerzas de dónde no quedaban para superar a un último contrincante y así llegar en 2ª posición. Había corrido los 5 Km en 19’:40’’ y acabado el triatlón en segunda posición con un tiempo total de 1h 13’ y 01’’. QUE GRANDE PABLO!!

Nuestra sorpresa fue cuando en la entrega de premios, los atletas populares, de la categoría de “licencia de día” fueron totalmente ignorados. Parecía increíble, pero solo entregaron trofeos a los triatletas federados y a las personalidades de la ciudad relacionadas con el mundo del deporte.



No tuvieron en cuenta que “los populares” también habían competido, entre ellos y de manera separada al resto, que suponían casi el 40% de de los triatletas participantes del evento, que habían pagado casi 40€ por su licencia de un día, que habían hecho el mismo esfuerzo que los “pro” y que sobretodo eran el “alma” de la competición. ¡¡Fueron totalmente olvidados por la organización!!


Cualquier aficionado al deporte sabe que el mayor reconocimiento que puede tener un atleta popular, es poder ver recompensado su esfuerzo durante la competición. A diferencia de los federados y los “pro”, que buscan marcas que les permitan escalar posiciones en sus ligas particulares o incluso “pelear” por conseguir los golosos premios en metálico que ofrecen las pruebas, a los “populares”, nuestra única motivación es progresar día a día en el deporte que practicamos, superando prueba tras prueba nuestras marcas personales. La mayoría, muy pocas veces tenemos la oportunidad de subir a un podio y si cuando por fin lo logramos, nos niegan esta mínima recompensa, la decepción es enorme.


Dejando aparte el reglamento que marca la Federación para este tipo de pruebas, en cuanto a premios y trofeos, nos parece increíble e imperdonable que los responsables de la organización, compuesta por atletas muy curtidos y expertos en el mundo del deporte y que además han sido pioneros en la promoción del deporte popular en nuestra ciudad, hayan ninguneado de esta manera al atleta “raso”, arrinconado al olvido a atletas que hasta ahora han sido su sustento y la base de sus proyectos deportivos y que siempre han reconocido su trabajo tomando parte en todas las pruebas que durante los últimos años han organizado.


No costaba nada un mínimo gesto, un pequeño reconocimiento. Nos duele decirlo, pero en esta ocasión la organización no estuvo a la altura de las circunstancias. Los atletas populares, como siempre si lo estuvieron acudiendo una vez más en masa a la competición.


¡Enhorabuena campeones!